Vemos TV. Cuando logramos unir mágicamente algo de dinero, más tiempo libre y quizá con un poco más de esfuerzo, una grata compañía, también vamos al Cine. Nos probamos lentes para ver en 3D, y camino a casa nos sintonizamos de nuevo a la imagen en movimiento desde las pequeñas pantallas de equipos celulares. Pero, ¿notamos realmente cómo va cambiando la industria? Luego del salto, un breve repaso sobre el origen de la tv, los autocines y el 3D.
Imagen pertenece a Photwerkstatt on flickr
Últimamente he tenido acceso a buen material sobre Audiovisual y Cine en el formato más romántico posible, libros!. Y como siempre en este blog el afán es netamente altruista en pro de los estudiantes y colegas en formación, comenzaré a compartir algunas pinceladas útiles para la cultura de la imagen en movimiento.
La Televisión, el 3D y los Autocines
Los experimentos sobre la transmisión de imágenes en movimiento empezaron a comienzos del siglo XX, y la primera demostración exitosa tuvo lugar en el Alexandre Palace de Londres, en 1935. En 1945, la televisión había logrado establecerse en Estados Unidos, con nueve emisoras funcionando y unos siete mil aparatos en los hogares.
En 1952, el número de aparatos había alcanzado los veinte millones sólo en el Reino Unido, y los cines acusaban una caída considerable de público. El éxito del «aparato» y su programación obligó a Hollywood a contraatacar con trucos publicitarios como la «olorvisión» o el 3D, pero también con técnicas más duraderas, como las pantallas panorámicas [CinemaScope], mejor sonido estereofónico y una ampliación de los géneros. Aún así, la industria cinematográfica nunca volvió a ser tan poderosa como la década de 1930, cuando el 65% de la población iba semanalmente al Cine.
¿Pero dijo 3D?
Tal vez te parece raro que hablemos de 3D en tiempos tan remotos. Lo cierto es que si bien la tecnología utilizada no era como la de hoy en día, el 3D se ha investigado desde los comienzos del Cine.
El cerebro crea profundidad al ver dos imágenes separadas y simultáneamente con cada ojo. Las imágenes proyectadas emplean película estereoscópica. Los experimentos de Steven Spielberg y James Cameron han sugerido un futuro presente para este formato.
El modo en que miramos
¿Recuerda la presentación de Los Picapiedras y su estacionamiento en un «Roca-Autocinema» para ver una película? Bueno, los autocines obviamente no derivan de la pre historia, más bien nacieron también en la década del 30 y se reprodujeron después de la segunda guerra mundial, como un gremlins bajo el agua. Cuenta la leyenda que durante su apogeo en Estados Unidos había unos 4000. Los autocines hacían más fácil a las familias el ir al cine con los niños, y por supuesto también daban mayor privacidad a los adolescentes. «Ustedes saben…»
Al principio la tecnología era simple -una pantalla bien sujeta a unos árboles con una radio a todo volumen detrás-, pero posteriormente los autocines se equiparon también con sonido estereofónico que llegaba a cada auto con un transmisor de radio. Todo se diluiría con la televisión y la sensibilidad al tiempo atmosférico.
Basado en el escrito del mismo nombre del libro La Historia del Cine [Blume]