En 1946 dos legendarios artistas comenzaron una inaudita colaboración para desarrollar un cortometraje animado. Mucho más de medio siglo después, esta creación finalmente sería terminada, dando vida a «Destino».
Este es precisamente el texto que acompaña el inicio de una pieza sin precedentes y que tomó más de 60 años en ser terminada, 25 animadores descifrando crípticos guiones y una viuda al servicio del trabajo con el fin de terminar con una pieza lo más fiel a la idea original. Después del salto les compartimos «Destino», cortometraje que fue presentado en sociedad, allá por 2003, pero que bien vale la pena rescatar en este humilde blog audiovisual.
Cuenta la leyenda, que como muchos otros proyectos, y vaya que sí sabemos de esto los audiovisuales, «Destino» fue confinado a dormir en los talleres de Disney debido a la falta de recursos. Corría la época de la segunda guerra mundial y la empresa estaba tan débil financieramente que el viejo Walt no fue capaz de terminar el trabajo como correspondía.
Muchos años después, sería nada menos que su hijo, quien a la par de «Fantasía» y su versión de 2000, decidió hacer un segundo rescaté y tomar los únicos dibujos originales del cortometraje, los cuales son justamente la secuencia de las tortugas que aparecen en la imagen que acompaña esta entrada y, sumado al trabajo de animadores, en papel y en formato digital, por fin sacarla a la luz en el año 2003 un día 2 de Junio. La música fue escrita por el compositor Mexicano, Armando Domínguez e interpretada por Dora Luz.
El corto de seis minutos y sin diálogos, sigue la historia de Cronos y el amor desafortunado que siente por una mujer mortal. La historia continúa a medida que se suceden las danzas femeninas a través de un paisaje surrealista [cómo no!] inspirado por supuesto, en las pinturas de Dalí.
