Llega el día viernes y muchos podrán disponer de un par de días libres en los que podrán realizar las más variopintas actividades de esparcimiento físico e intelectual. Y como en Editando nos gusta que nuestros lectores pasen un tiempo agradable y de calidad, es que hoy hemos decidido compartir con ustedes las cinco series inglesas a las que usted debería echarle una mirada este fin de semana de noviembre. ¿Que no será mucho cinco series? Bueno, si consideramos que las producciones televisivas británicas suelen ser breves, en comparación con las realizadas en el país gringo, son una excelente alternativa para disfrutar de una experiencia completa en poco tiempo.
Spaced
Antes que Shaun of the Dead fuese un éxito, Edgard Wright ya había hecho equipo con Simon Pegg y Nick Frost dando forma a Spaced, una sitcom en la que podemos ver todas las obsesiones que este trío ha ido mostrando a lo largo de sus carreras. Spaced está llena de referencias a la cultura pop, al comic y al cine.
Tim y Daisy son dos desconocidos que se han quedado sin casa. Él quiere ser dibujante de comics profesional, Ella quiere ser escritora. Ambos son un fracaso. Entablan amistad en un café y se dan cuenta que ambos necesitan un lugar para vivir y el único que encuentran disponible tiene como condición que sólo pueden arrendarlo parejas. Como la necesidad tiene cara de hereje, mienten y se quedan con el lugar, dando paso así, como en toda buena sitcom, a que ocurran un sinfín de peripecias en el lugar, junto a extraños vecinos, como el singular pintor Brian Topp, o el amigo fanático de las armas, Mike Watt
Spaced tuvo dos temporadas de siete episodios cada una.
Black Books
Bernard Black es un antisocial, alcohólico y fumador dueño de una pequeña librería en Londres, algo extraño, porque odia a la gente y tener que lidiar con posibles compradores es una tortura que termina con Black insultándolos cada vez que puede. Quizás con la única persona que se lleva bien es Fran, la neurótica dueña de una tienda de bisutería. Bernard es cínico, caustico y flojo, igual que uno de los redactores de Editando, y es feliz con esa forma de vida.
Pero, porque siempre hay un pero, su vida cambia cuando le vende a un estresado Manny «El pequeño libro de la tranquilidad», que termina tragándose y «absorbiendo» la sabiduría barata que este posee. Así es como finalmente termina trabajando con Bernard dando pie a surrealistas historias en torno a la librería.
Black Books es una sitcom bastante convencional en su realización, pero a cambio está repleta de situaciones hilarantes, como la que acompaña esta entrada, que hacen que cada capítulo pase uno tras otros sin darnos cuenta.
La serie consta de tres temporadas de seis episodios de 20 minutos cada una, por lo que verla será cosa de unas cuantas horas.
State of Play
Esta maravillosa miniserie de seis episodios, que tuvo un decente remake gringo en la pantalla grande el 2009, es un intrigante thriller político que encanta a cualquiera que se atreva a verla. La vida de Stephen Collins, un político interpretado por el increíble David Morrissey, comienza a enredarse cuando su asistente de campaña es encontrada muerta en el metro de Londres. Aquí es cuando Cal McCaffrey, encarnado por John Simm a quien muchos recordarán por su paso en Doctor Who como The Master, el viejo amigo Collins y periodista de investigación comienza a escarbar en la muerte de la asistente y ve cómo el tinglado es más grande de lo que imagina. Mentiras y silencio, como suele ser el mundo de la política.
La serie es una defensa del trabajo periodístico comprometido: ese que se cocina fuera de las redacciones donde los periodistas investigan, la policía entorpece y el poder esconde sus trapos sucios.
Blackpool
David Morrisey vuelve a repetirse el plato en esta serie que también tiene como protagonista a David Tennant, el recordado Décimo Doctor, en un drama policial que une a su intriga el elemento músical. Sí, como leen, es un musical policial, pero vamos, no se preocupen, no es que se pongan a bailar y cantar como bien hacen en Glee, sino que es un elemento catalizador que permite que la historia avance, por extraño que parezca. Además, las canciones no son interpretadas por los actores porque escuchamos el tema original y si ponemos atención podemos escuchar las voces de los actores, en un ejercicio que por lo menos este redactor no había visto antes.
Para remate, la serie, de seis episodios, es entretenida.
Ripley Holden (Morrissey) es un empresario que acaba de abrir su casino de juegos en Blackpool, pero no contaba que la noche de inauguración sería manchada por un misterioso asesinato ocurrido al interior del casino. ¿Sospechosos? Por decenas. ¿Corrupción? Obviamente.
Red Riding
Una miniserie de tres episodios. Oscura, siniestra, donde es mejor callar antes de intentar luchar contra una fuerza nefasta que es superior a uno. Red Riding, una trilogía enmarcada en tres años en particular 1974, 1980 y 1983 e inspirada muy libremente en hechos reales ocurridos en Yorkshire por esos años.
Así es como Edward Dunford, interpretado por el actual Spider-man Andrew Gardfield, intenta descubrir al responsable de los secuestros de varias niñas ocurrido en años anteriores. Así es como Peter Hunter intenta atrapar al Destripador de Yorkshire tras 14 brutales femicidios perpetrados. Así es como John Piggot intenta resolver todas las intrigas de una buena vez. Pero ninguno sabía con lo que realmente se enfrentaba.
Un punto a considerar sobre la serie es su apartado técnico pues cada uno de los episodios fue realizado con un soporte distinto. 1974 fue filmado en 16 milímetros y en 16:9; 1980 fue en 35 milímetros y un aspecto 2.35:1; y 1983 fue rodado utilizando una cámara digital Red One, dándole así a cada uno de los capítulos una atmósfera visual distinta y bastante atractiva. Algo que quizás uno nota debido a la formación profesional pero aún así es algo que se agradece.
Y termino diciendo esto: Vean Red Riding.
¿Ya han visto algunas de estas series? ¿Qué les han parecido? ¿Qué otras series recomendarían?
Saludos.-
3 comentarios
Creo que recomendaría Psychoville… una serie británica que me marcó… excelente. Bueno tb, Sherlock… hay que decirlo.
– Life on Mars
– Ashes to Ashes
– The Inspector Lynley Mysteries
– Inspector Morse
El toque ingles, es otra cosa….
les recomiendo una que vi hace algunos años y es simplemente genial
Hustle, la movida.