Una polvareda extraña ha levantado «El Juego de Ender», la adaptación cinematográfica del clásico libro del mismo nombre, escrito por el otrora respetado Orson Scott Card, ajena al carácter fílmico sino ligada a la ideología del autor.
El cuento es simple. Desde que Card consiguiera fama, reconocimiento y costales de dinero con El Juego de Ender y La voz de los Muertos (1), se volvió loco. ¿Por qué? te lo contamos como siempre, después del salto.
Scott Card y la objetividad perdida…
Sé que exagero con el párrafo anterior, obviamente, pero no mucho. Junto con ir arruinando libro a libro el Enderverso (2), Card ha sido víctima de sus creencias (3) y dichos en los que se muestra contrario a los derechos homosexuales, mostrándose a favor de leyes prohibitivas y censurando abiertamente. Debido a esto, desde hace ya un puñado de meses que grupos LGBT han llamado de forma sistemática a boicotear la película.
El juego de Ender – Trailer Subtitulado
A propósito de la película, comparto el trailer para aquél que no tenga idea de lo que estoy escribiendo.
La pregunta que surge aquí es obvia. ¿Podemos juzgar un obra debido a las creencias de su creador? Podemos decir que sí, podemos decir que no, podemos pasar todo el día debatiendo.
Volví a leer El Juego de Ender hace un tiempo impulsado por esta polémica, para ver si en aquella lectura de años atrás había pasado por alto la homofobia de Card. No encontré nada. Quizás rizando el rizo en extremo encontremos algo de pedofilia al tener a niños entre 6 y 12 años corriendo desnudos por la Escuela de Batalla (4), o quizás sea un poco incestuosa la relación que Ender tiene con su hermana Valentine, pero estos ejemplos, reitero, son exageraciones.
¿Por qué entonces tanta polémica? Hay algo que como hispanohablante pasé por alto al leer una versión traducida. Los Fórmicos, los enemigos a derrotar, son llamados de manera peyorativa Insectores. En inglés, este término es buggers, igual que el personaje de La Venganza de los Nerds. Resulta que también sería una manera de llamar peyorativamente a los homosexuales. Que tan así sea, no lo sé, pero Card hace rato que le esta haciendo el quite al término y sólo se refiere a estos invasores como Formics.
El Juego de Ender es un buen libro que ahora es injustamente castigado. Porque sí hay un libro de Card que merece el infierno es Marionetas de la Sombra tercer libro de la Saga de las Sombras (5) en el que sin tapujos ni miramientos Card nos sermonea sobre cómo deben ser las parejas, lea usted:
Cuando la vida de un hombre se deforma tanto que su deseo no va dirigido a las mujeres, su deseo de hallar significado a su vida no cambia. El hombre busca algo que supere su vida. Una especie de inmortalidad. Una forma de cambiar el mundo, de hacer que su vida importe […]
Aquí está el significado de la vida: que un hombre encuentre a una mujer, que una mujer encuentre a un hombre, la criatura más distinta a ti, y luego procree hijos con ella, con él, o que los encuentre de otro modo, pero que los críe luego, y los vea hacer lo mismo, generación tras generación, de modo que cuando muráis sepáis que sois permanentemente una parte de la gran red de la vida. Que no sois un hilo suelto, cortado.
El buen Orson, con poca delicadeza, hace este sermón a través del único personaje homosexual de la serie (6) y para mayor inri más adelante pese a que Volescu, el personaje en cuestión, no estaba en disposición de mirar a las mujeres con deseo, hace que termine casado y con hijos. Orson, se te fueron las cabras pa’l monte!
Si bien es cierto que el odio hacia Orson Scott Card puede estar justificado, por lo menos El Juego de Ender no merece sufrir por los pecados de su padre.
(1) El Juego de Ender y su secuela La Voz de los Muertos ganaron los premios Hugo y Nebula, importantes dentro de la fantasía y Ciencia Ficción.
(2) Saga compuesta por más de 16 libros divididos en tres estadios: La Saga de Ender, La Saga de las Sombras y Las Guerras Formicas. Estos estadios podríamos definirlos como Secuelas, Secuelas Paralelas y Precuelas respectivamente.
(3) Orson Scott Card es un mormón practicante. Hasta fue misionero en Brasil en la década de los 70.
(4) La Escuela de Batalla es el centro de entrenamiento de los futuros comandantes de la Flota Internacional. Locación principal de las novelas El Juego de Ender y La Sombra de Ender.
(5) La Saga de las Sombras es la secuela paralela a la Saga de Ender en la que se cuenta la historia de Bean, el joven comandante de la escuadra de Ender en la Escuela de Batalla y su posterior historia tras el final del Juego de Ender y antes de La Voz de los Muertos.
(6) Antón Volescu es el responsable de la alteración genética que hace especial a Bean. Podría considerársele su “padre”.
Todo este texto tan bakán me lo copié a mi mismo desde Fetiche&Pastiche, sólo otro blog donde escribo, una vez al año…