El término mise en scène, o «puesta en escena«, puede simplemente significar todo lo que está colocado frente a la cámara y su organización. Pero el crítico André Bazin acuñó una acepción mucho más compleja para definir la técnica de utilizar los planos de secuencia con una cámara en movimiento y gran profundidad de campo, con el fin de unificar al personaje y su entorno, y de aportar una alternativa al corte de planos.
Hoy como cada martes intentamos en Editando poner algo de historia en nuestro humilde recolector de información audiovisual a través de las 100 ideas que cambiaron el Cine. Pase a leer y si desea comentar puede hacerlo más abajo, pero no olvide compartir que es lo más importante!
Idea n° 75 | La puesta en escena: La cámara profundiza.
En el sentido más básico del término, la puesta en escena de una película implica distintos elementos: decorado, espacio y atrezzo; vestuario y maquillaje; ubicación de los personajes y timbre de su interpretación; banda sonora; elección de la lente, tipo de película y diseño de iluminación, así como colocación y movimiento de la cámara. La puesta en escena es vital para transmitir significado en películas de ficción, documentales y de vanguardia, pues contribuye a establecer la atmósfera, sugerir motivos y reforzar temas. Un plano bien compuesto puede revelar tanto sobre un personaje y el mundo en el que habita como las propias páginas de un diálogo.
Georges Méliès y los expresionistas alemanes fueron de los primeros que utilizaron la puesta en escena. Pero la duración de los planos se redujo al evolucionar el montaje paralelo, y, con la transición al sonido, la profundidad de la imagen se subordinó a la lógica narrativa, la verdad psicológica y la continuidad espacio-temporal. Sin embargo, directores como William Wyler u Orson Welles redescubrieron la técnica, lo que llevó a Bazin a formular la teoría que inspiró la politique des auteurs, la nouvelle vague y el surgimiento de un realismo integral que permitiría «una recreación del mundo a su imagen y semejanza«.
Las mejoras en la iluminación, las aperturas menores de diafragma y las películas más rápidas permitieron a Gregg Toland refinar la fotografía con profundidad de campo y producir imágenes más nítidas en primeros planos, planos medios y planos largos. Pero mientras Toland rodaba Cumbres Borrascosas [Wuthering Heights, 1939], de William Wyller y Ciudadano Kane [1941], de Orson Welles, Jean Renoir revelaba en películas como La Gran Ilusión [1937] el modo en que una cámara podía descender sobre detalles para guiar al espectador, posicionar a los personajes en sus entornos y crear paralelismos y contrastes entre ellos.
En la posguerra, Max Ophüls demostró su maestría en la puesta en escena con la sinuosa cámara de La ronde [1950], y con los travellings de 360 grados y los planos de grúa que re definieron el espacio diegético en Lola Montes [1955].
Los travellings, las panorámicas y los planos de grúa ayudan, de hecho, a que las tomas puedan ser más largas, pues los movimientos de la cámara crean «cortes invisibles» que re-encuadran una acción continua. Los planos secuenciales fueron acogidos por Bazin como más cercanos a la realidad y democráticos que el montaje. En ocasiones, este tipo de plano puede ser algo autoindulgente, pero los planos-secuencia fluidos permitieron a directores como Kenji Mizoguchi, Roberto Rossellini, Miklós Jancsó, Theo Angelopoulos o Hou Hsiao-hsien poner en pie entornos creíbles al tiempo que imponían su personalidad.
A pesar de la resistencia producida en Hollywood ante una técnica que se consideraba autoreflexiva, ostentosa y cara, algunos directores estadounidenses, como Vicente Minnelli, Samuel Fuller, Robert Altman, David Fincher o Gus Van Sant, han recurrido también a la técnica de la puesta en escena en un esfuerzo por captar la espontaneidad, la especificidad y la ambigüedad de una escena. La duración de un plano determina el modo en que lo vemos. Sin embargo, la moda actual de la edición rápida significa que la puesta en escena sigue vinculada más al cine independiente y de arte y ensayo que al mayoritario.
Hasta acá por ahora con la puesta en escena, la semana próxima pueden pasar por: El Espacio Fuera de Campo, la idea n°76 de las 100 que cambiaron para siempre la historia del Cine.
Saludos!