Si algo hemos aprendido gracias a las cientos de horas que se han invertido en este país en repeticiones del Chavo del 8 es que la venganza nunca es buena, mata el alma y la envenena. Pero también sabemos que la venganza es un plato que es mejor servir frío. Así que en virtud de eso, hoy les traemos un cortometraje animado lleno de maldad y venganza, pero de seguro no de la forma que esperan.
Una pequeña niña, a quien llamaremos Spoocky, sufre del constante acoso y hostigamiento, bullying si es que nos gustan los neologismos, por parte de una compañera de curso, a quien llamaremos Francisca Merino.
Resulta que la Pancha Merino es súper mala onda y se burla de la pobre Spoocky, porque es pobre y le gusta vestirse de negro y la trata de nana y la usa como alfombra. La Spoocky, como buena gotica darky, aburrida de la pretenciosa Merino, opta por la opción más sensata [para una chica que es gotica darky]e invoca a un demonio. Claro, como nada resulta tan fácil en la vida, ni siquiera el jugar con fuerzas espectrales del averno.
Por si acaso, la cuestión no es tan oscura-siniestra-me voy a hacer pipí de miedo, pese a que le puse harto color con eso en los párrafos anteriores y en la imagen que acompaña esta entrada, la verdad es que los realizadores de este trabajo, Phillip Simon y Alyse Miller son súper buena gente y nada de góticos, consiguen un trabajo de animación entretenido y con una fantástica progresión narrativa. ¿Cree que le pongo mucho? Entonces vea el cortometraje y déjenos sus impresiones en los comentarios!.
Saludos.-