Desde 2004 hasta 2014 existió en Chile un concurso que buscaba exprimir la creatividad audiovisual de profesionales y aficionados, forzándolos a contar historias en sólo 30 segundos. Si lo pensamos, ahora que tenemos vines maestros de sólo 6 segundos y una infinidad de videos en Instagram de sólo 15 segundos, los 30 que pedía nanometrajes era tiempo suficiente, sin embargo para la época, fue del todo novedoso y exigente.
En una especie de homenaje al desaparecido concurso y aprovechando los tiempos muertos que tenemos entre un render y otro, les invito a ver y compartir una selección con 5 de los mejores nanometrajes de la historia.
Nanometrajes “la millonésima parte de un metro”
[Por Octavio Spierccolli] Siguiendo la línea de hace unas semanas atrás, sobre el concurso creativo de “Cortometrajes donde aparecen unicornios”, En Chile encontramos una variedad de competencias, de tónicas similares. Una de ellas fue “Nanometrajes”, un concurso que nació bajo el desarrollo de la productora Santiaguina Plagio, y un fondo de desarrollo de responsabilidad social empresarial, de Minera Escondida.
La definición de Nanometrajes nace “conjugando la fugacidad de un nanómetro (la millonésima parte de un metro) con la expresión audiovisual más contemporánea”, según expresa el medio oficial del certamen. Dentro de esa diversa pero igualmente novedosa iniciativa, cada año se convocaba a miles de audiovisuales y amantes del audiovisual a competir, todos en búsqueda de la Hormiga de Oro, el premio que se entregaba por el “Nano” destacado.
Comparto 5 nanometrajes destacados entre los años 2010 a 2014.
El cómico conteo popular de nuestros emblemas patrios – Votación Popular – Nanometrajes 2009.
La criolla comida Chilena «La Once» – Nanometraje Destacado en 2010
El surrealista «Mamushka» ganador del año 2011
El expresionista «Progresión» ganador del año 2013
El romántico «Semáforo» ¿a quién no le ha pasado? Mención Honrosa el año 2014
Sin dudas Nanometrajes fue una excelente iniciativa para motivar la creatividad, sin depender de ostentosas cámaras y aparatosas producciones. ¿Y que tal? ¿Te atreves a compartir tu Nanometraje?