La iluminación cinematográfica ha servido siempre para tres funciones principales: garantizar claridad visual, sugerir la autenticidad de una escena y transmitir una atmósfera con el fin de provocar una respuesta emocional.
Hoy, como parte de nuestro afán por compartir lo que con los años hemos ido aprendiendo y también dentro de las 100 ideas que cambiaron el cine, revisa con nosotros luego del salto, un poco de historia y buenos ejemplos sobre la iluminación artificial en el Cine. Como siempre, pensado en todos los fanáticos del audiovisual.
Idea n° 35 | La iluminación artificial: Hágase la luz
A pesar del uso de la iluminación artificial en fotografía, la mayor parte de las primeras películas se realizaron con luz del día difusa y se rodaron o en exteriores o en estudios que estaban bien abiertos a los elementos o tenían paredes de cristal con techos replegables.
Mientras que los productores de Hollywood tendían a filmar en exteriores, sus homólogos de la Costa Este usaban arcos voltaicos y lámparas de vapor de mercurio para complementar la luz natural a mediados de la primera década del siglo XX. También idearon efectos para mostrar en cuadro la fuente de luz de las lámparas, el fuego y las ventanas, e hicieron un uso dramático de la iluminación para aislar a los personajes en una escena, darles más glamour con primeros planos de luz suave, o sugerir algún tipo de amenaza con planos contrapicados, siluetas y sombras.
Junto con la iluminación de una sola fuente, estas técnicas se importaron de Europa después de moldear el expresionismo, el impresionismo y el realismo poético.
El claroscuro en Blade Runner
El clásico claroscuro en un entorno futurista fue lo que nos dejó Blade Runner en 1982, el cual recordamos en una romántica escena entre Harrisond Ford y Sean Young. De esas que no se olvidan. Después de todo, es Ridley Scott más Vangelis, no podía ser de otra manera.
Pero fueron los directores de fotografía estadounidenses los que, con su inventivo uso de los focos, los arcos de carbono, los reflectores y las pantallas difusoras, provocaron el abandono de la iluminación meramente frontal y lateral en favor de un sistema de tres puntos de luz que modelaba de una forma más nítida las figuras y las separaba mejor del fondo.
La iluminación plana se consideró de poca calidad, y los directores de fotografía desarrollaron métodos personales de esculpir con la luz para reafirmar o desconcertar al espectador. De todas formas, aproximadamente en la misma época en que se introdujo el sonido, surgió una iluminación clásica hollywoodense.
Este estilo de clave media a alta, que evitaba las sombras oscuras, se mantuvo hasta la época de la posguerra, cuando empezaron a emplearse películas más rápidas en las secuencias rodadas en exteriores. Los diseños de luces se simplificaron a medida que los platós se hicieron más pequeños y el color sustituyó a la monocromía, y los directores de fotografía emularon la iluminación uniforme no direccional de la televisión y la técnica de rebotar la luz de la que fue pionera la nouvelle vague.
El vaso iluminado en «Sospecha» 1941
Alfred Hitchcock puso una luz en el vaso, [0:32 en video] de modo que la leche pareciera más siniestra. Lo pueden ver en el trailer de «Sospecha» desde el segundo 32.
La preocupación europea por la fuente de luz en la puesta en escena tuvo eco en Estados Unidos en la década de 1970. Pero tanto las películas independientes como las de los estudios compartieron un aspecto característico: el uso de una iluminación de clave baja [sin sombras], que reflejaba los temas más oscuros de New Hollywood y que fue fundamental en las películas taquilleras de ciencia ficción, ficción y las basadas en el cómic, junto con la creciente incidencia de la luz coloreada.
Además de consultar con el director de la película, los responsables de fotografía también colaboran con el equipo de producción y los diseñadores de vestuario para decidir sobre la posición y el ocultamiento de las luces en el set de rodaje, así como para informar sobre el modo en que la temperatura de color de la iluminación afectará a los tonos y las texturas. La iluminación moderna es notable por su diversidad y por los contrastes de luz suave y dura, en lo que también, mucho tienen que decir las nuevas cámaras que cada tanto se actualizan a tecnologías de óptica y software sobresalientes.
No country for old men
El director de fotografía Roger Deakins prefirió utilizar sólo focos de automóviles para iluminar por detrás a Ed Tom Bell, [1:57 en video] personaje interpretado por Tomy Lee Jones, justo cuando éste entra en la habitación de un motel para la película de los hermanos Coen, No es país para viejos, en 2007.
Si encontraste interesante este artículo, entonces te invitamos a revisar los 34 anteriores de la misma categoría, como también estar atentos para la semana próxima cuando revisemos en más detalle un movimiento clásico en la historia del Cine, El Expresionismo.
Saludos!
1 comentario
Pingback: INDICE R3 – Cine