Con tremendo despliegue de estrellas, desde Leonardo DiCaprio a Nicole Kidman, se inauguró hoy el 66º festival de Cannes presidido nada menos que por Steven Spielberg, quien lo presentó como una fiesta de celebración de la diversidad del cine mundial.
En la ceremonia de apertura introducida por la actriz Audrey Tautou, la francesa que se hizo famosa por su papel en «Amélie», Spielberg recibió conmovido una calurosa ovación de pie.
Los invitados asistieron luego a la proyección de «El Gran Gatsby», antes de una cena de gala y una megafiesta organizada en una tienda montada especialmente cerca del puerto de Cannes, animada con fuegos artificiales. Como siempre decimos, más detalles los encuentras después del salto!
Cannes 2013 comenzó a rodar
[Vía agencia AFP] «Son dos semanas de celebración del cine más que dos semanas de competencia», dijo Spielberg en rueda de prensa junto a los ocho miembros del jurado que el 26 de mayo emitirán su fallo sobre las 20 películas seleccionadas entre más de 1.800 para concursar por la Palma de Oro.
La última adaptación de la novela de Francis Scott Fitzgerald «El Gran Gatsby», marcó el tono desde la primera proyección, en un festival donde el cine de Estados Unidos está en primer plano en una Europa en crisis, aunque el film no tuvo buena recepción en Cannes.
Los organizadores aceptaron abrir el evento con este filme ya estrenado la semana pasada en Estados Unidos –una herejía para muchos– a cambio de su redituable aporte de glamour.
La lujosa extravagancia en 3D no fue abucheada en su pase de prensa en el Palacio de Festivales –una tradición en este certamen, donde los críticos pueden demoler una película–, pero un indiferente silencio invadió la sala al concluir la cinta de Baz Luhrmann, que costó más de 100 millones de dólares.
«Por supuesto que hay críticas«, concedió luego ante la prensa Luhrmann. «Pero no hay que hacer caso a las críticas. Yo quiero que la gente vaya a ver mi película, que es lo que cuenta«. Por lo pronto, la taquilla trajo a Luhrmann el consuelo de más de 50 millones de dólares cosechados el pasado fin de semana en Estados Unidos.
El yate de 86 metros y casco azul «Seven Seas» de Spielberg anclado frente a la Croisette de Cannes impuso a la vista de todos el ostentoso desembarco norteamericano en esta meca del cine, donde el director de «E.T.» y «Tiburón» dispone además de una suite en el hotel Majestic y una villa alquilada para su séquito.
En torno a la presidencia de Spielberg hay este año un jurado excepcional de pesos pesados, que incluye a los actores Nicole Kidman (EEUU-Australia), Daniel Auteuil (Francia) y Christoph Waltz (Austria), al director Taiwanés Ang Lee y al rumano Cristian Mungiu.
Cannes, sin dudas una fiesta del cine mundial
«Yo considero que aquí no estamos en una competencia», dijo Spielberg. «Un film cuyo objetivo es atraer la mayor cantidad posible de espectadores no es lo mismo que uno que pone una mirada diferente sobre la vida y trata de cambiar la vida de la gente».
«Hay películas que tratan sobre temas de la diversidad cultural de cada país», destinados a «un público determinado», otros que buscan la mayor cantidad de espectadores. Y «no se puede comparar peras y manzanas», dijo.
En liza por la competición oficial abundan este año propuestas de cine intimista, en algunos casos con alguna dosis de escándalo.
Ya consagrados en Cannes, los estadounidenses Steven Soderbergh y los hermanos Coen y el franco-polaco Roman Polanski presentarán respectivamente «Behind the candelabra», «Inside Llewyn Davis» y «La venus de las pieles».
El Mexicano Amat Escalante es el único representante de América Latina que compite por la Palma de Oro, con su filme «Heli» que describe la penetración del narcotráfico en la sociedad mexicana y los mecanismos de defensa que genera.
En liza igualmente hay otros consagrados, incluyendo el danés Nicolas Winding Refn («Only God forgives» con Ryan Gosling), el norteamericano James Gray («The immigrant» con Marion Cotillard) y el iraní Asghar Farhadi («Le Passé» con Bérénice Béjo y Tahar Rahim).
Pero Cannes no se limita a la competición de la selección oficial, y las secciones paralelas como Una Cierta Mirada, La Semana de la Crítica y la Quincena de los Realizadores reservan sorpresas para todos los gustos, donde figuran entre otros estrenos mundiales de México, Chile y Argentina.
La norteamericana Sofia Coppola presentará por ejemplo su esperado último filme «The bling ring» con Emma Watson.
Entre los veteranos, Robert Redford actúa en un filme también fuera de concurso, «All is lost» de J.C Chandor. El chileno Alejandro Jodorowsky estrenará a los 84 años «La danza de la realidad», de corte autobiográfico, Alain Delon (78 años) será homenajeado con la proyección de «A Pleno Sol» remasterizada, y también subirá la escalinata Kim Novak, la inolvidable rubia de «Vértigo» de Alfred Hitchcock.
La parte no siempre visible de Cannes son también los negocios, con el mercado de películas más importante del mundo: 10.000 participantes de un centenar de países, 4.000 filmes presentados, 1.500 proyecciones y una facturación de 1.000 millones de dólares el año pasado.
Manténganse atentos, pronto más detalles sobre Cannes a medida que avance el certamen.
Saludos!