El viejo refrán «La avaricia rompe el saco» cobra sentido en este bello cortometraje realizado en el Escuela de la Imagen Gobelins. Por lo mismo, es increíble que haya sido realizado por estudiantes de esta celebre institución francesa como un trabajo de graduación.
La historia hace eco del refrán citado en el párrafo anterior. Un Rey, sin reino, sin castillo, ni siquiera con súbditos que lo adoren, busca la forma de conseguir un lugar en el cual le brinden pleitesía y así llega a lugares y excesos que le costarán caro.
Saludos.-