En Editando, aunque ustedes no lo crean, tenemos muchas reuniones de planificación en las que discutimos sobre el futuro del sitio y sobre posibles entradas que podríamos escribir más adelante. Es habitual que en estas reuniones, @Bassofia, como buen director, me diga que escriba una entrada sobre una de mis series favoritas, Doctor Who, pero siempre me mostraba reacio a hacerlo. Como ya se han dado cuenta, ese momento ha llegado. En esta entrada hablaremos sobre una serie icónica dentro de la televisión inglesa y un importante referente dentro de la ciencia ficción mundial.
Este será un repaso por la historia del Doctor cuando estamos casi un mes del estreno de su temporada treinta y dos, algo que pocas series pueden decir.
En el lejano 1962
Mientras en Chile se realizaba el séptimo campeonato mundial de fútbol, en Inglaterra, Sydney Newman se convertía en el director del área dramática de la BBC y su principal misión era conseguir que el liderazgo del canal estatal se mantuviera frente a la alza que en esos momentos experimentaba ITV. Lo que Newman no esperaba era que su idea de poner un programa los sábados de tarde como una forma de rellenar la parrilla se convertiría en un verdadero hito de la televisión.
Forjando un mito.
La idea de Newman era crear una serie infantil que además pudiera ser vista por jóvenes y adultos. Junto con eso, por ser una serie para los niños, debía entregar algo de contenido educacional. En este punto entran dos personas que fueron trascendentales dentro del proceso de creación de Doctor Who, Donald Wilson y Verity Lambert.
Wilson, quien trabajaba en la BBC desde mediados de los ’50, había recibido poco antes de la llegada de Newman a la Corporación, la tarea de averiguar si la ciencia ficción podía ser rentable para el canal y además cuales serían los tópicos fundamentales que se podían utilizar en el programa.
Tras el arribo de Newman a la BBC, se organizó una reunión en donde Wilson expuso los datos obtenidos en la investigación y se establecieron los conceptos básicos de la serie: viajes en el tiempo, un trío de personajes compuesto por una joven pareja y adulto fueron algunos de estos.
Así fue como todo comenzó a andar. Sydney Newman entrega las labores de producción y dirección a Rex Tucker, pero luego sería relegado a cumplir solamente con las labores de dirección tras la llegada de Verity Lambert, quien se convertiría en la productora de la serie y quien estaría a cargo del proyecto durante sus primeras tres temporadas.
El reparto original de la serie junto a Verity Lambert (al centro)
Una historia de otro mundo
Tras muchos retrasos, cambios en el guión y tener que rehacer el piloto (que luego sería transmitido en los ’90), Doctor Who se transmite por primera vez el 23 de noviembre del 1963, rompiendo la calma del seno familiar inglés con un impresionante y distante tema que parece, muy acorde con la serie, sacado de otro mundo, que se convirtió en una influencia para toda una generación de músico electrónicos que aparecerían una década más adelante.
El tema fue compuesto por Ron Grainer y con arreglos finales de Delia Derbyshire. El compositor quedó tan asombrado con el resultado final que preguntó «¿yo compuse esto?» a lo que Delia respondió «Bueno, la mayor parte.»
En este primer episodio, Una chica de otro mundo, se nos presenta al primer reparto de la serie, que estuvo compuesto por El Doctor y su nieta, Susan Foreman, extraterrestres desterrados de su planeta natal que viajan a través del tiempo y el espacio en una nave especial que es más grande por dentro que por fuera. A ellos se le suman los profesores que Susan tuvo durante su estadía en la Tierra, Ian Chesterton y Barbara Wright. Con ellos como núcleo la serie comenzó a explorar el tiempo y el espacio, yendo y viniendo, conociendo a cavernícolas de la edad de piedra hasta Aztecas o Romanos. La idea era que este viejo gruñón y cascarrabias fuera una especie de maestro para los niños enseñándoles como vivían en tiempos remotos o cuales eran las tradiciones en las grandes civilizaciones, buscando seguir los principios educativos que Newman buscaba imponer en la serie pero para su desgracia (o fortuna) la ciencia ficción fue dominando más y más las historias hasta tomarse por completo el programa.
Evolución y Cambio
Doctor Who se convirtió rápidamente en un éxito para la BBC. Sábado a sábado la serie era vista por las familias inglesas, quienes junto al Doctor, se internaban en viajes a planetas desconocidos, se enfrentaban a los temibles Daleks, Hombres Cibernéticos, conocían a Marco Polo. Todo era miel sobre hojuelas. Pero llega 1966. Un año antes, Verity Lambert se había retirado de la producción del programa, y ahí comenzaron los problemas. William Hartnell, el hombre tras el personaje del Doctor, había sido sindicado como una persona de trato díficil, con muchas diferencias con el equipo, lo que sumado a su pobre estado de salud, lo llevo a decidir que ese sería su último año interpretando a quien se había convertido en el abuelo favorito de una nación.
Dentro de la ficción, la serie ya había sufrido la salida de varios de sus personajes. Para esa fecha solo Hartnell se mantenía del reparto original, pero con cada salida un nuevo personaje era introducido. Esto vez era diferente, se trataba del personaje que daba título a la serie.
La solución fue tan simple como arriesgada, mantener al personaje pero cambiando al actor que lo interpreta. Visto desde el presente, este acto parece normal dentro de la serie, pero en su momento fue un verdadero shock para los espectadores. Algunos se mostraron complacidos con el cambio, alabando la caracterización realizada por Patrick Troughton (a quien algunos recuerden como el cura que aparece en La Profecía). Otros por el contrario, encontraron que el cambio fue lo más idiota que podían haber hecho. Lo cierto es que con este cambio, conocido dentro de la ficción como Regeneración, la serie consiguió una excusa para seguir adelante incluso cuando el actor siente que ya no tiene nada más que aportar al personaje o cuando el rating (cosa que al igual que Chile es algo que se mide) baja esta por los suelos.
Por lo general el nuevo Doctor en escena es radicalmente opuesto al que le precedió. Mientras la primera encarnación del Doctor era seria y malhumorada, siempre intentado mantener una distancia con sus compañeros de viaje, la segunda se caracterizó por ser más relajada y poseedor de un humor absurdo, además de cercana a quienes le rodeaban. De igual manera, cuando ocurrió la siguiente regeneración, la personalidad del Tercer Doctor cambio para convertirse en un elegante caballero, amante de la aventura y que no le hacía el quite a una pelea de ser necesario.
De esta forma la serie pudo mantenerse al aire durante 26 años, explotando distintas facetas del Doctor con cada regeneración. Pero no todo dura para siempre y menos aun en televisión. Después de casi treinta años y siete encarnaciones, Doctor Who se despide de las pantallas británicas y tendrían que pasar 16 años para que el Doctor, en su cabina azul, volviera a sorprendernos con sus andanzas.
Como la idea de esta entrada es presentar la serie más que hablar en detalle de la misma lo dejamos hasta aquí con el repaso del pasado de Doctor Who. Este jueves saldrá la segunda parte y ¿final? en donde hablaremos sobre la «nueva» serie y de las novedades para la próxima temporada.
Si quieren que haya una entrada más detallada de la historia de Doctor Who o tienen algún opinión o insulto hacia mi persona, es cosa que lo dejen en los comentarios para hacerlos saber. Por mientras los dejo con esta guía para principiantes que puede ayudarles con algo de información básica sobre el Doctor.
Saludos.-
3 comentarios
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Soy un solitario whovian chileno. Recuerdo esta serie siempre…Creo que influyó en mi forma de entender la vida y despertó mi curiosidad por el universo. Recuerdo que cuando dejó de exhibirse en Canal 13 fue cuando el DOCTOR visitaba un planeta donde había una dictadura…y claro, eso no agradaba al regimen de entonces.
Saludos,
espero más información…
¿Esta página es chilena? Soy un whovian de Chile que tiene toda la serie revivida (y temporada y media de la época de Hartnell) en el disco, y nunca había visto a otro chileno decir que una de sus series favoritas fuera Doctor Who.
Saludos y esperando «The Rebel Flesh»